El pasado sigue siendo pesado para Gerry Adams

Ponemos un artículo de Íñigo Gurruchaga, publicado en lavozdigital.es, que comenta el tema de la nueva polémica por el tema de los abusos sexuales del hermano de Gerry Adams, Liam.

Como en otras ocasiones, advertimos que el texto está puesto integro, sin editar, y todas las apreciaciones forman parte del punto de vista del autor del artículo. Como siempre, apelamos a una lectura crítica.

La Policía, el Abogado General, la Fiscalía y el 'ombudsman' de la Policía de Irlanda del Norte han abierto investigaciones sobre la posibilidad de que Gerry Adams cometiera un delito de ocultación de los abusos sexuales de su hermano, Liam, contra su hija, por los que un jurado lo declaró culpable hace diez días. El presidente del Sinn Féin denuncia una caza de brujas de políticos y medios de comunicación.

Adams mantiene que nunca perteneció al IRA pero su memoria está desprestigiada. En el curso de un interrogatorio como testigo de la acusación, en el primer juicio contra su hermano, en abril, que fue suspendido por cuestiones legales, no recordó el año en el que se formó el Ejecutivo compartido de Irlanda del Norte, pero más chocante fueron sus incoherencias sobre hechos y fechas del caso.

La BBC ha publicado una transcripción del tenso interrogatorio de Gerry Adams por la abogada de la defensa, Eilis McDermott. Su versión de este trauma familiar es la base sobre la que reposan las acusaciones públicas de que cometió un delito y proyecta sombras sobre la personalidad privada del líder más sofisticado del grupo terrorista europeo más letal en la segunda mitad del siglo XX.

En marzo de 1987, Gerry Adams fue de Belfast a Buncrana, en el noroeste de la república irlandesa, con su cuñada, Sally, y su sobrina, Áine, para intentar, según él, que su hermano, que vivía allí con su nueva pareja, admitiera los abusos sexuales contra su hija. El hermano los negó. Un día después, sin que Adams lo recuerde, denunció a su cuñada a los servicios sociales por la falta de higiene en su casa.

Sarah y Áine habían acudido antes a la Policía pero decidieron no seguir al creer que los policías estaban más interesados en convertirlas en confidentes que en el abuso. Cuando la sobrina decidió denunciarlo de nuevo, en 2007, el nuevo Servicio de Policía de Irlanda del Norte (PSNI), que fue reconocido ese año por el Sinn Féin, solicitó una entrevista al presidente de dicho partido, que estaba ya en el Gobierno.

Se celebró en el despacho de su abogado, con un tiempo límite de 40 minutos, porque estaba atareado. Adams informó de lo ocurrido en 1987 pero, por consejo de su abogado, no añadió más «porque habría tiempo de hacer nuevas declaraciones». Dos años después, en 2009, cuando Àine acudió a los medios, Adams concedió una entrevista a una televisión tras intentar en vano que su sobrina presentase una petición judicial para prohibir que los medios publicasen nada sobre el caso.

En esa entrevista, Adams explicó que, en el curso de conversaciones familiares sobre lo que ocurría con Liam y Àine, descubrió que su padre había abusado sexualmente de algunos de sus nueve hermanos. Explicó que había intentado lograr lo que quería su sobrina, el reconocimiento del abuso por su padre y una petición de perdón. Y que, al no lograrlo, perdió contacto con Liam durante unos quince años.

Pero la abogada McDermott presentó al testigo Gerry Adams fotografías con su hermano, su padre y su íntimo colaborador, Martin McGuinness, en 1991; con su hermano, en 1996; en una boda, en 1997; en un bautizo, en 1997; en una campaña electoral, en 1997; en un acto social, en 1998; con padre y hermanos, en 1998. Le presentó la dedicatoria a su hermano de un discurso, en 1994, de un libro, en 1996. En el prólogo de ese libro autobiográfico, Adams agradece especialmente la colaboración de su hermano, Liam.

Peligro

Un mes antes de la entrevista en la televisión y más de dos años después de su primera entrevista con la Policía, llamó a los investigadores a través de su abogado para hacer una nueva declaración, en la que señaló que, en el curso de conversaciones entre 2001 y 2007, su hermano le confesó que cometió abusos sexuales contra su hija pero una sola vez. En el juicio de abril, aceptó sin embargo que su hermano se los reconoció en 2000.

Entre 1998 y 2003, Liam Adams trabajó como asistente social con grupos de niños y jóvenes en el monasterio de Clonard, donde la familia Adams acude a misa y donde tenía un íntimo amigo, el sacerdote Alec Reid, intermediario en el proceso de paz de Irlanda del Norte y enviado por Adams para mediar en el País Vasco. Pero afirma que no advirtió a Reid del historial de su hermano sino a otro cura, fallecido en 2006.

Gery Adams creía que Liam no era peligroso, que tanto él como Áine trataban de resolver problemas del pasado. Lo que arroja el pasado es que el padre violó a su hija y la forzó a mantener relaciones sexuales entre 1977 y 1983, cuando tenía entre cuatro y nueve años. Liam conocerá su sentencia en los próximos días. Áine dice que su tío, 'El Barbas', no la apoyó sino que intentó preservar su imagen y su carrera.

Gerry Adams se queja de que se le juzgue severamente fuera de los tribunales cuando él intentó mediar para encontrar una solución en el seno de una familia traumatizada. Ha cumplido 65 años hace unos días y el resto de su vida, incluso si no se enfrenta a un juicio por ocultar tal delito, estará marcado por este trazo imborrable, que se añade a los que ya tiene como jefe terrorista y arquitecto del proceso de paz.