El sargento detective Robinson del PSNI dijo: “Todos tienen derecho a vivir en una comunidad segura y estable, y este tipo de criminalidad sin sentido y temeraria no será tolerada. Afortunadamente, hoy no estamos lidiando con lesiones graves, o peor aún".
La policía agregó que estaban trabajando para establecer un motivo para el ataque, que causó daños en el frontal de la casa. Detrás de este ataque y otro anterior está un tema de drogas.
El ataque ocurrió en Ballynahinch Road, Lisburn alrededor de la 1.45 am del miércoles (hora local), cuando se dispararon cuatro tiros contra la propiedad.
El hombre armado se sospecha que huyó en un jeep Honda blanco. El vehículo fue visto cerca y la policía en una breve persecución detuvo el jeep.
Tres hombres a bordo, de 20, 24 y 31 años, fueron arrestados bajo sospecha de una serie de delitos y están bajo custodia policial.
Podemos estar ante un ataque paramilitar, siendo el segundo tiroteo contra una casa de Lisburn en las últimas semanas.
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