Lo que es algo diferente esta vez es la localización, cerca de Springfield Road, West Belfast, en un bastión republicano.
Si bien es cierto que las agresiones racistas se han dado también en el pasado en zonas republicanas, no es menos cierto, que la oleada de racismo que sufre Belfast está focalizada en su inmensa mayoría en zonas unionistas/lealistas.
En esta ocasión, la víctima fue atacada en la zona Slieve Dubh junto a Springfield road.
El hombre que fue herido en el asalto racista ha dicho que sus atacantes también amenazaron con "atropellar" a su hija de dos años de edad, e incendiar su casa.
El hombre de 36 años de edad, negro y originario de Nigeria, fue atacado a pocos metros de su casa el lunes.
Él se dirigía a trabajar cuando una pandilla de "cuatro a seis personas" lo insultaron y luego le agredieron físicamente.
La víctima necesitó tratamiento hospitalario, incluyendo puntos de sutura en el labio superior.
Él dijo que al pasar cerca del grupo, comenzaron a gritar insultos racistas, y le dijeron que "volviera a su país."
Él dijo que las amenazas comenzaron cuando él cogió su teléfono móvil para ponerse en contacto con su esposa, que es originaria de Belfast Oeste. Dijo que la banda supuestamente creía que estaba llamando a la policía.
"Me golpearon con una botella en la cabeza, en la mano. Yo estaba muy, muy asustado porque había un montón de ellos, golpeandome por todas partes."
Su esposa, que corrió en su ayuda con su hija en sus brazos, dijo que la banda "le ataca desde todos los ángulos".
Dos hombres, de 25 y 32 años de edad, fueron detenidos, pero han sido puestos en libertad bajo fianza en espera de nuevas investigaciones.
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