Ashe, cuya unidad luchó y derrotó a la Royal Irish Constabulary (RIC) en Ashbourne durante la Semana Santa de 1916, fue arrestado nuevamente después de pronunciar un discurso ante una multitud republicana en agosto de 1917.
Exigiendo el estatus de prisionero de guerra, Ashe se embarcó en una huelga de hambre, pero fue asesinado después de ser alimentado a la fuerza en su quinto día de ayuno.
Más de 30.000 personas acudieron a presentar sus respetos a Thomas Ashe durante el cortejo fúnebre al cementerio de Glasnevin.
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