Según los informes, un grupo de jóvenes pateó la puerta de una casa en Kilburn Street a eso de las 9.40 de la tarde del lunes (hora local). Luego, poco tiempo después, dos ventanas de una casa en Donegall Avenue fueron dañadas con ladrillos.
Patrick Yu, del Consejo de Irlanda del Norte para la Igualdad Racial, que lucha contra el racismo, dice que todos deben respetar la diversidad.
Él dijo: "Condenamos cualquier ataque contra cualquier nacionalidad, pueblo o gente local. No hay lugar para el racismo en Irlanda del Norte''.
"Es muy importante que el vecindario los apoye, para darles confianza y darles la bienvenida a su comunidad".
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