Nuevo incidente racista en las calles de Derry

Un joven que gritó insultos racistas a una adolescente negra que visitaba la ciudad de Derry ha sido condenado por un juez a escribir un ensayo sobre el odio racial.

El Tribunal de Primera Instancia de Derry se enteró de que Stephen Gerard Bradley, de Templemore Mews, gritó "nigger" (negro en un contexto peyorativo) a la joven, que tenía entre 14 y 16 años de edad y estaba caminando en Shipquay Street en compañía de su madre adoptiva el 22 de julio este año.

También se reveló que Bradley hizo un "saludo alemán" (es de entender que se refiere a un saludo nazi) hacia la chica.

El juez de distrito Barney McElholm dijo que Bradley había traído "la vergüenza a sí mismo" y a "la ciudad" por su "completamente aborrecible" comportamiento.

Hubo imposición de una condena condicional y se le ordenó pagar una indemnización a la chica de 1.000£, el Juez añadió que en algunos países sería una pena obligatoria y que estaba tratando de pensar en una razón para no mandarlo a la cárcel.

Bradley McElholm finalmente ordenó que pasara 18 meses en libertad condicional.

Ordenó que como parte de la libertad condicional el joven de 28 años de edad, debe "componer un ensayo sobre el odio racial y la intolerancia sectaria, por qué estas cosas están mal y cómo va a asegurar que no va a murmurar una palabra más sectaria o con motivados raciales ".

McElholm dijo que la única cosa en favor de Bradley fue asumir su culpabilidad inicialmente y el hecho de que no tiene antecedentes penales sustanciales.

El tribunal oyó que Bradley lo sentía y dijo que lo hizo por la diversión de sus amigos.

Bradley también se declaró culpable de conducta desordenada, asalto a la policía y de resistencia la policía en un incidente separado en agosto.

La corte escuchó que Bradley estaba causando incidentes cerca de su casa y cuando llegó la policía se acercó a ellos de una manera agresiva.

Él comenzó a gritar y golpeó a una mujer policía en el pecho, fue detenido y cuando era trasladado a la comisaría empezó a cantar una canción sectaria.

La defensa dijo a la Corte que su cliente acepta que su comportamiento era "completamente intolerable", pero que fue motivado por el alcohol.

El abogado dijo que los comentarios "no están en su naturaleza" y que estaba "disgustado" y "avergonzado" por su comportamiento.

Finalmente agregó que "los futbolistas profesionales que incurren en este tipo de comportamiento tiene sanciones financieras".