Y se le informó de que: “No se puede descartar el uso de armas de fuego”.
Se considera que pertenecen a la UVF del este de Belfast y que no están contentos con el informe de una serie de incautaciones de drogas y arrestos a manos de la Paramilitary Task Force.
El editor de Sunday World, Brian Farrell, condenó la última de una larga serie de amenazas contra periodistas y las describió como "repugnantes".
"Los continuos intentos de las organizaciones paramilitares de intimidar y hostigar a los periodistas en Irlanda del Norte son motivo de gran preocupación", dijo.
"Muchos de nuestros periodistas ahora trabajan en un clima de miedo, y las amenazas de violencia contra ellos y sus familias son repugnantes. Una prensa libre es la piedra angular de cualquier sociedad democrática, y no seremos silenciados por los matones sin rostro que amenazan a nuestras comunidades y sus medios de vida.
Es imperativo que el PSNI utilice todos los recursos disponibles para garantizar que estos elementos criminales sean llevados ante la justicia".
La secretaria general de NUJ, Michelle Stanistreet, dijo: “Esta es otra amenaza cobarde de matones que intentan silenciar a los periodistas y a los medios libres. El sindicato hará todo lo posible para apoyar al periodista en cuestión y hacemos un llamado a quienes están detrás de esta amenaza para que la levanten de inmediato.
Las amenazas de muerte y las amenazas de otro tipo de violencia se han convertido en algo habitual para muchos periodistas en Irlanda del Norte, pero esta situación no tiene nada de normal.
El NUJ pide al PSNI que persiga enérgicamente a quienes están detrás de todas las amenazas a periodistas y trabajadores de los medios, y llevarlos ante los tribunales”.
Las amenazas forman parte de un patrón que ha visto a varios periodistas de todo el Norte enfrentarse a amenazas de muerte en los últimos años.
En marzo, la policía inició una investigación después de que aparecieran grafitis que amenazaban a periodistas en el sur de Belfast. La amenaza fue pintada en una pared temporal en el área de Bradbury Place y fue ampliamente condenada.
En los últimos dos años, varios periodistas se enteraron de amenazas de muerte de varios grupos paramilitares lealistas.
En febrero de 2021, se pintaron amenazas de muerte en dos paredes en el este de Belfast amenazando a la ex reportera de Sunday World, Patricia Devlin.
Dos periodistas de la BBC fueron atacados el año pasado después de estar involucrados en la realización de un documental de Panorama sobre el jefe del crimen de Dublín, Daniel Kinahan.
Dos reporteros del Sunday World fueron advertidos de un “ataque inminente” de elementos criminales dentro de la UDA en noviembre de 2020.
Y eso sucedió solo unos días después de que a otro reportero que trabajaba para el INM se le dijera que su vida estaba en peligro.
La SEA - UDA estaba siendo vinculada a esa amenaza, luego de una serie de incidentes similares a principios de ese año.
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