Si bien la BBC ha presentado este movimiento como apolítico, se produce solo una semana después de que un repugnante video de odio dirigido contra Michaela McAreavey, que fue filmado en un salón de la Orden de Orange, se volviera viral en las redes sociales.
En otros países, las organizaciones que promueven los mismos valores que la Orden de Orange son etiquetadas correctamente como ultraderechistas, racistas y sectarias.
Desafortunadamente, en Irlanda, el establishment político complace a la Orden de Orange presentándola como una especie de organización cultural inofensiva, ¡cuando no es nada por el estilo!.
A pesar de esta complacencia, la Orden de Orange sigue siendo la misma organización de extrema derecha, racista y sectaria que siempre ha sido y siempre será.
Si bien la eliminación de la cobertura en vivo del 'desfile' de Orange a través de Belfast es bienvenida, no es suficiente. ¡Toda la cobertura de 'celebración' de los eventos de Orange en la BBC y otros medios debe terminar!.
El estado abiertamente Orangista de la década de 1960 ha sido aplastado en gran medida por los esfuerzos colectivos de los republicanos irlandeses durante las últimas cinco décadas de lucha.
El final de la transmisión en vivo del 'desfile' principal de la Orden de Orange es solo otra indicación de la naturaleza cambiante del estado de los Seis Condados.
El desafío al que se enfrentan ahora los republicanos irlandeses es garantizar que el antiguo estado de Orange no sea reemplazado por un estado de los Seis Condados menos sectario que prolongue aún más el dominio británico en Irlanda.
Como lo hemos hecho durante más de 230 años, no podemos conformarnos con nada menos que con una nueva República de toda Irlanda.
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