Irvine figura como fideicomisario de la Asociación de Vivienda Comunitaria de Woodvale y Shankill (WSCHA), que tiene su sede en el oeste de Belfast.
El conocido lealista fue uno de los dos hombres arrestados la semana pasada por la policía que investigaba una alerta de bomba contra el ministro de Relaciones Exteriores de Irlanda, Simon Coveney, en el norte de Belfast en marzo.
Irvine compareció ante el tribunal el fin de semana pasado acusado de varios delitos, incluido la posesión de un arma de fuego y municiones en circunstancias sospechosas.
Un segundo hombre, Robin Workman, de 51 años, compareció ante el tribunal el lunes en relación con el incidente. Workman, de Shore Road en Larne, fue puesto bajo custodia por cargos de armas de fuego.
A principios de esta semana, el concejal del SDLP de Belfast, Carl Whyte, cuya abuela Peggy Whyte (52) murió junto con un hombre de la RUC en una bomba fuera de su casa en 1982, pidió que se destituyera a Irvine como fideicomisario de la asociación de vivienda.
Un portavoz de la Comisión de Caridad dijo que "el equipo de investigación de la comisión está al tanto del asunto que se ha informado en las noticias y se está involucrando con la organización benéfica.
"Como se trata de un asunto en vivo, no se pueden proporcionar más comentarios en este momento", agregó.
En un comunicado, WSCHA dijo que el asunto se considerará la próxima semana.
"Los fideicomisarios de la asociación se reunirán a principios de la próxima semana para discutir la situación actual y tomar las medidas que considere necesarias", dijo el comunicado.
Intercomm Ireland, donde Irvine trabajó como director de proyecto, no ha dicho nada sobre su futuro.
Winston 'Winkie' Irvine también pretendia 'trabajar' en un proyecto de exprisioneros financiado por los contribuyentes de 258,000£, ahora su arresto puede hundir los lucrativos ingresos de 5,000£ a la semana del considerado como jefe de la UVF.
Winston 'Winkie' Irvine, estaba listo para comenzar a trabajar este verano en el proyecto de ex prisioneros lealistas financiado por los contribuyentes. El esquema, pagado por la Oficina Ejecutiva en Stormont a través del controvertido programa Communities in Transition (CIT), es para ayudar a los ex paramilitares a reconectarse con la sociedad. lo cierto es que lo que se está haciendo es inyectar dinero y más dinero a personajes bastante turbios, siguendo un guión de 'dinero por paz'.
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