Un enorme "anillo de acero" se erigirá alrededor del multimillonario mientras duren sus vacaciones en la isla.
No se espera que Trump se aventure más allá de su hotel de cinco estrellas en Doonbeg, Condado de Clare. Sin embargo, su esposa Melania puede ver algunos de los lugares de interés locales.
Otros miembros de la familia Trump también pueden hacer una aparición en Irlanda, pero los detalles se mantienen en secreto en estos momentos.
Alrededor de 1.000 agentes de la garda han sido asignados a los condados de Clare y Limerick para los próximos días.
Trump aterrizará el miércoles por la tarde en el aeropuerto de Shannon, donde sostendrá una reunión bilateral con el Taoiseach Leo Varadkar, luego será transportado a Doonbeg en helicóptero.
Las restricciones viales alrededor de la pequeña aldea entraron en vigor ayer. Se les ha dicho a los residentes locales que esperen que se cierren algunas rutas y que se establezcan puntos de control en otras.
La Garda ha organizado una importante operación de seguridad en cooperación con el Ejército, la Armada y el Cuerpo Aéreo.
Los servicios de seguridad están preparandose también para la posible llegada de miles de manifestantes cerca del aeropuerto de Shannon el miércoles, pero no esperan ningún problema.
Se establecerá un "campo de la paz" con una variedad de oradores y músicos programados para participar. Los organizadores han dicho que la protesta será "amigable y familiar".
Aunque Trump no viajará a Dublín, también se planean varios eventos para la capital. La coalición 'Stop Trump Ireland' realizará una protesta en el Jardín del Recuerdo el jueves por la noche.
Más de 30 organizaciones, incluyendo grupos de derechos humanos, medioambientales, contra el racismo, contra la guerra, LGBTQ, mujeres, igualdad y derechos de los migrantes y partidos políticos participarán.
Aunque su calendario completo aún no está confirmado, el plan de seguridad se basa en la suposición de que el presidente estadounidense regresará a Shannon el jueves por la noche y se quedará una noche más en Doonbeg antes de regresar a Washington el viernes. Doonbeg en sí será un foco de seguridad sin precedentes, liderado por el Servicio Secreto de los Estados Unidos.
También se declarará una zona de exclusión aérea sobre el resort del oeste de Clare, y se desplegarán equipos especiales antidrones alrededor del campo de golf y los terrenos de Doonbeg.
Mientras que los equipos de seguridad de los Estados Unidos viajarán en gran parte por carretera, Trump viajará a Irlanda en un helicóptero, que cuenta con sistemas de seguridad avanzados que incluyen defensas antimisiles, y que fue entregado al aeropuerto de Shannon por un avión de la fuerza aérea estadounidense de carga pesada.
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