La víctima, de 54 años, había esquivado a la muerte por dos veces, en las que fue tiroteado por los grupos armados C.IRA y AAD.El repartidor de comida murió a tiros en su coche en el oeste de Belfast, en la zona de Divis poco antes de las 22:30 (hora local) del lunes.
Se informó que el hombre fue alcanzado en el cuello. Fue llevado al hospital en estado crítico, pero no sobrevivió a pesar de los esfuerzos para salvarlo.
Fue atacado mientras estaba sentado en su coche en Lady Street posiblemente después de ser atraído a la zona por una orden de entrega de comida rápida falso.
Este ha sido el tercer tiroteo en Belfast, en un espacio de menos de 24 horas, otros dos jóvenes resultaron heridos en dos ataques de castigo.
Desde Sinn Féin, Paul Maskey dijo que sus pensamientos y simpatías estaban con la familia del hombre muerto. Visitó la escena, donde la policía le informó de que el hombre había fallecido.
Él dijo: "Este es una triste noche en Belfast y en la sociedad con una serie de disparos en toda la ciudad. Habrá un duelo de la familia esta noche y mis simpatías están con ellos. Este tipo de ataques no sirven para nada y tienen que parar."
Murray, que era originario de la zona del New Lodge, oeste de Belfast, dijo en ese momento que había sido acusado de ser un traficante de drogas - acusación que negó -.
A medida que se recuperó de ese tiroteo, dijo que el ataque fue un intento de ejecutarlo.
Él mismo había sido herido en un ataque armado del C.IRA con anterioridad, del que también salió con vida.
Afirmó que fue un intento de extorsión, y volvió a negar que vendiera drogas. Él desafió a los grupos armados para sacar cualquier evidencia de su presunta actividad criminal.
Murray deja una pareja y un hijo pequeño detrás. Su esposa murió de cáncer hace varios años.
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