RNU.- Mientras luchas por alimentar a tu familia y calentar tus hogares, nuestros supuestos representantes políticos se pelean mientras Westminster castiga a la gente del norte ocupado para obligar a sus títeres a regresar a la junta de poder compartido de la institución delegada de Stormont.
Es hora de cambiar, es hora de olvidar las sobras que ofrece la mesa británica, ¡queremos una mesa propia! ¡Lo exigimos!
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