En una entrevista con el Chronicle, Russell Watton habla sobre su papel en el bombardeo del restaurante Salmon Leap, una explosión prematura que mató a cuatro compañeros y su condena por un ataque armado "gratuito" que lo dejó enfrentado a tres cadenas perpetuas.
Watton dijo que estaba motivado por una sed de venganza por las ''atrocidades del IRA'' y que no tenía "gran interés" en las víctimas creadas en su propio lado.
Igualmente se ha negado a condenar la continua actividad paramilitar en las urbanizaciones de Coleraine, diciendo simplemente que era "un hecho" que las organizaciones paramilitares podían enfrentar a los narcotraficantes mejor que la policía, afirmando que de no estar, esas áreas estarían inundadas de drogas (es bien sabido que esas mismas organizaciones a día de hoy inundan de drogas las zonas que controlan). Para ello ha puesto como ejemplo la vecina Ballymena con unos 400 adictos a la heroina y Coleraine donde , ha dicho, no hay ninguno gracias a que los paramilitares no dejan la entrada de drogas (olvidando que en Ballymena hay presencia paramilitar igualmente).
Sin embargo, reconoció haber cometido errores y dijo que ahora hace todo lo posible para persuadir a los jóvenes de que no los sigan, insistiendo en que usa la influencia que tuvo con los paramilitares de una manera "positiva".
Russell Watton ha dicho: "No nacimos criminales, como tampoco lo fueron los que se unieron al IRA en las áreas republicanas. Solo éramos jóvenes que crecíamos en tiempos extraordinarios, tiempos que eran increíblemente amargos y sectarios", dijo.
"La moral fue arrojada por la ventana. Sabía que lo que estaba haciendo era inmoral e ilegal, pero aún sentía que era lo correcto, dado el ataque del IRA en ese momento".
"Tomé una decisión de conciencia para unirme a la UVF y no puedo culpar a nadie por ello. Pero hubo políticos, creo, que radicalizaron a los jóvenes lealistas.
Recuerdo haber estado presente en un discurso que el reverendo Ian Paisley pronunció en el ayuntamiento de Coleraine. Dijo que todos aquellos débiles de rodillas deberían abandonar la habitación. No quería que se quedara nadie que no estuviera preparado para luchar y morir por Ulster. Docenas de hombres jóvenes se unieron a grupos paramilitares debido a las palabras de Paisley esa noche".
Cuando se le preguntó cómo veía ahora su participación en la UVF, el consejero del PUP dijo: "Nadie fue asesinado debido a mis actividades y me alegro de eso, aunque fue por pura fortuna".
"Simplemente nos motivaron las represalias, realmente no pensamos demasiado en las víctimas. Desde luego, no respondería por todo lo que hice o lo que hizo la UVF. Se cometieron atrocidades y las personas hicieron cosas que normalmente nunca hubieran soñado hacer".
"Algunos de los ataques fueron sectarios. Vivíamos en tiempos muy amargos y sectarios. Pero también creo que las acciones de los paramilitares lealistas, combinadas con las de las fuerzas de seguridad, dieron como resultado la derrota militar del IRA".
Watton, que fue liberado de la prisión en 1989, dijo que el ex líder del PUP, el difunto David Ervine, fue fundamental para convencerlo de que la política era el camino a seguir.
"Desde luego, no quiero que los jóvenes de Coleraine hagan lo que yo hice", dijo.
"Siempre hago todo lo posible para evitar que se unan a organizaciones paramilitares. Les animo a involucrarse en una banda [de música] o algo más".
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