Desde entonces, se ha convertido en un día en que las feministas, socialistas, republicanas, sindicalistas y otras fuerzas progresistas reafirman su dedicación a deshacer la desigualdad de género que se sustenta en un sistema capitalista patriarcal.
Hoy, las mujeres en Irlanda se enfrentan a la injusticia en las esferas social, política, cultural y económica. Esto se manifiesta en sus lugares de trabajo, comunidades y, en muchos casos, en sus hogares.
Desde 1996, cientos de mujeres han sido violentamente asesinadas en Irlanda. Más de la mitad de las mujeres asesinadas violentamente fueron asesinadas a manos de sus parejas domésticas, los asesinos escapan a la justicia en muchos casos.
Esto mientras NO hay refugios para mujeres en nueve condados, y servicios muy inadecuados en muchos otros condados del estado de los Veintiséis Condados. Solo existe un tercio de los espacios de refugio recomendados en todo el estado.
En 2018, el electorado de los veintiséis condados votó abrumadoramente a favor de derogar la arcaica octava enmienda.
Pero, a pesar de esto, todavía existen muchas barreras para acceder a los servicios de aborto, mientras que a nuestras hermanas en los Seis Condados todavía se les niega su derecho a la autonomía corporal.
En toda Irlanda, y más allá, es más probable que las mujeres tengan trabajos precarios, a tiempo parcial y mal pagados, y es menos probable que ocupen puestos de responsabilidad.
Mientras que el cuidado infantil inasequible empuja a muchas mujeres a dejar el trabajo remunerado.
Estos son solo ALGUNOS de los problemas que enfrentan las mujeres en Irlanda hoy.
Su destrucción y la creación de una sociedad verdaderamente igualitaria requerirán la construcción de un movimiento #PorUnaNuevaRepública que revertirá el legado del colonialismo, el control de la iglesia y el capitalismo, creando una sociedad basada en los principios de Libertad, Igualdad, Justicia y Comunidad.
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