Nuevo episodio de violencia racista en East Belfast

Una vez más el racismo se vuelve a hacer presente en el este de Belfast, tan solo una semana después de otro ataque a esta misma familia y un incidente separado contra una familia en parte nigeriana.

En este caso, la familia de Nigeria ha sido el blanco de un ataque racista cuando varios ladrillos fueron lanzados contra su casa de Brooklands Drive, Dundonald en torno a las 5:30 am del sábado (hora local).

Promise Awoyelu, un niño de tan solo ocho años de edad, fue herido en la cabeza por fragmentos de vidrio cuando uno de los ladrillos arrojados impactó en la ventana de su dormitorio, en el ataque otra ventana resultó destrozada.

Charles Awoyelu, padre del niño afirmó: "Estoy aterrado en este momento y no sé dónde debo tener a mi familia esta noche". "Yo no sé por qué nadie se mete con una familia indefensa", dijo.

"Tengo cinco hijos que están aterrorizados en la casa, mi esposa está asustada y tengo miedo de ir a trabajar y volver, porque no sé qué va a pasar cuando vuelva."

Y agregó: "Hemos estado aquí seis o siete meses y nuestros vecinos han estado bien, no hemos tenido ningún problema con nadie".
"Yo voy a mi trabajo y soy una persona amante de la paz tratando de formar una familia joven aquí. Pero tengo que salir de la zona ahora por nuestra seguridad".

Charles vive en la casa familiar con su esposa y cinco hijos y ha estado viviendo en el Norte durante siete años y trabajando en un hospital como científico biomédico.

Este es el segundo ataque contra la casa en una semana, el domingo pasado otras dos ventanas fueron destrozadas y el parabrisas de un coche dañado.



Robin Newton del DUP dijo: "Este fue un ataque vergonzoso contra una familia que forman parte de la comunidad en Ballybeen".
"Después de hablar con los residentes locales en el área, hoy quiero dejar claro su esperanza es que esta familia no se verán obligados a dejar la zona a causa de una matones racistas".
"La familia Awoyelu ha recibido asistencia de la comunidad y en particular de su iglesia y estas acciones son el verdadero rostro de la gente en Ballybeen".