El 16 de marzo de 1988, los Voluntarios Danny McCann, Sean Savage y Mairead Farrell que fueron asesinados por el SAS en Gibraltar, debían ser enterrados en el cementerio de Milltown, Belfast oeste. En un cambio de los procedimientos normales de seguridad, la RUC y el ejército británico habían acordado permanecer lejos del entierro.
Cuando los ataúdes fueron bajados, se oyó una ráfaga de disparos y esto fue inicialmente confundido con la habitual despedida. Algunas personas incluso aplaudieron. Sin embargo, no fue un saludo. Michael Stone se había infiltrado en la multitud en un intento de eliminar al liderazgo republicano con varias granadas y dos pistolas, una pistola semiautomática de 9 mm y un revólver a.357.
Stone asesinó a tres personas: dos civiles Thomas McErlean, y John Murray, y un voluntario del IRA Provisional, Caoimhin Mac Bradaigh, quien había intentado desarmarlo. Él hirió a más de sesenta, incluyendo a un niño de 10 años que recibió un disparo en la espalda, una abuela de 72 años y una madre embarazada que resultó herida por metralla.
Stone escapó hacia la autopista, fue perseguido por varios miembros de la multitud, pero continuó disparando sus pistolas y lanzando granadas de mano a sus perseguidores. Stone fue capturado por la multitud, que comenzó a golpearlo y gritar que lo matarían. Finalmente fue puesto en la parte trasera de un coche y fue expulsado para ser ejecutado por el IRA, entonces el coche fue interceptado por la RUC, que lo detuvo y lo llevó al hospital. Michael Stone más tarde confesó los tres asesinatos en Milltown y otros tres asesinatos paramilitares cometidos de antemano.
En su juicio, Stone recibió sentencias de un total de 682 años, pero fue liberado después de cumplir 13 años como resultado del Acuerdo del Viernes Santo.
En su autobiografía, Stone admitió que había recibido "asistencia especial" de los agentes de la RUC para llevar a cabo el ataque del cementerio. Más tarde afirmó que había renunciado a la violencia, pero permaneció en la UDA, y en 2005 dijo que apoyaría y participaría en una campaña de violencia si la UDA terminaba su alto el fuego.
En noviembre de 2006, Stone fue acusado del intento de asesinato de Martin McGuinness y Gerry Adams, siendo arrestado intentando entrar en los edificios del Parlamento de Stormont mientras estaba armado. Stone fue posteriormente condenado a otros 16 años de prisión.
Cuando los ataúdes fueron bajados, se oyó una ráfaga de disparos y esto fue inicialmente confundido con la habitual despedida. Algunas personas incluso aplaudieron. Sin embargo, no fue un saludo. Michael Stone se había infiltrado en la multitud en un intento de eliminar al liderazgo republicano con varias granadas y dos pistolas, una pistola semiautomática de 9 mm y un revólver a.357.
Stone asesinó a tres personas: dos civiles Thomas McErlean, y John Murray, y un voluntario del IRA Provisional, Caoimhin Mac Bradaigh, quien había intentado desarmarlo. Él hirió a más de sesenta, incluyendo a un niño de 10 años que recibió un disparo en la espalda, una abuela de 72 años y una madre embarazada que resultó herida por metralla.
Stone escapó hacia la autopista, fue perseguido por varios miembros de la multitud, pero continuó disparando sus pistolas y lanzando granadas de mano a sus perseguidores. Stone fue capturado por la multitud, que comenzó a golpearlo y gritar que lo matarían. Finalmente fue puesto en la parte trasera de un coche y fue expulsado para ser ejecutado por el IRA, entonces el coche fue interceptado por la RUC, que lo detuvo y lo llevó al hospital. Michael Stone más tarde confesó los tres asesinatos en Milltown y otros tres asesinatos paramilitares cometidos de antemano.
En su juicio, Stone recibió sentencias de un total de 682 años, pero fue liberado después de cumplir 13 años como resultado del Acuerdo del Viernes Santo.
En su autobiografía, Stone admitió que había recibido "asistencia especial" de los agentes de la RUC para llevar a cabo el ataque del cementerio. Más tarde afirmó que había renunciado a la violencia, pero permaneció en la UDA, y en 2005 dijo que apoyaría y participaría en una campaña de violencia si la UDA terminaba su alto el fuego.
En noviembre de 2006, Stone fue acusado del intento de asesinato de Martin McGuinness y Gerry Adams, siendo arrestado intentando entrar en los edificios del Parlamento de Stormont mientras estaba armado. Stone fue posteriormente condenado a otros 16 años de prisión.
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