La pareja obligada a abandonar su casa de Belfast con sus hijos con necesidades especiales tras un ataque incendiario por parte de lealistas ha dicho que cree que fueron atacados por asistir a una manifestación de apoyo a los inmigrantes atacados recientemente. La pareja se ha mudado a una nueva casa después del ataque del 15 de agosto.
Una camioneta de trabajo fue destruida en agosto fuera de su casa en una zona firmemente lealista del sur de Belfast, y huyeron poco después con sus dos hijos por miedo a más ataques.
El incendio se llevó a cabo después de que el hombre fuera reconocido por manifestantes antiinmigración en una manifestación en el centro de la ciudad de Belfast para oponerse a los recientes ataques racistas en la ciudad.
En los días posteriores a la manifestación, su casa fue atacada con huevos. Sin embargo, el ataque incendiario más grave ocurrió alrededor de dos semanas después de la manifestación, dejando a la pareja y a sus hijos adolescentes, ambos con autismo, "traumatizados".
Dijeron que la policía les aconsejó que se reunieran con un programa local de justicia restaurativa y se enteraron del motivo del ataque.
La mujer explicó: “En esa reunión, nos dijeron que en realidad no estaban detrás de esto los paramilitares, pero yo soy de la zona y sé que estaba autorizado. La policía confirmó más tarde con el Ejecutivo de Vivienda que los paramilitares estaban detrás de esto y nos reubicaron”.
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