Un curso de seis meses debía comenzar con una sesión de inscripción en un salón municipal en el pueblo costero de Castlerock, al este de Derry, y una clase de conversación en irlandés para principiantes.
El evento fue cancelado porque los organizadores y el consejo local fueron informados de amenazas que se cree que provenían de paramilitares lealistas.
Las amenazas llegaron después de que el Consejo de Comunidades Lealistas, un grupo paraguas que "representa las opiniones" de los grupos paramilitares lealistas, incluidos la UVF y la UDA, mantuviera una siniestra reunión con el Ministro del DUP Paul Givan.
La delegación incluía al doble asesino sectario Bobby Rodgers, condenado por matar a dos adolescentes católicos en asesinatos separados; el hombre ampliamente considerado como el líder de la UDA en el sur de Belfast, Jackie McDonald; y el destacado lealista Winston "Winkie" Irvine, que se encuentra actualmente ante los tribunales acusado de posesión de armas, pero se sabe que no se presentó.
Se reunieron con Givan el pasado martes para instarle a detener la lengua irlandesa, en particular los planes para una escuela de lengua irlandesa en el este de Belfast. El LCC describió más tarde la reunión como "extremadamente constructiva".
Conradh na Gaeilge, la organización cultural de la lengua irlandesa, señaló que habían solicitado una reunión con el ministro unionista en febrero de este año, que fue rechazada sin explicación.
Dijo que la decisión de reunirse con el LCC después de rechazar al grupo de lengua irlandesa era "escandalosa".
El diputado de Sinn Fein, John Finucane, describió la reunión como "profundamente preocupante".
"La lengua irlandesa está prosperando en nuestra sociedad y un número récord de nuestros niños y jóvenes están siendo educados a través del irlandés, con una demanda cada vez mayor de nuestra Gaelscoilanna local", dijo.
“Es indignante que un grupo que incluye a representantes de bandas unionistas intente influir en las decisiones sobre el futuro de nuestros niños y su derecho a ser educados a través del idioma que elijan”.
El Dr. Pádraig Ó Tiarnaigh, de la red en lengua irlandesa An Dream Dearg, expresó su preocupación por las últimas amenazas.
“En una sociedad democrática, es un derecho fundamental que las personas puedan llevar adelante su vida diaria sin sufrir intimidación ni discriminación”, afirmó.
“Se trata de un crimen de odio sectario. Está surgiendo un patrón muy siniestro y preocupante, ya que esta es la última de una serie de amenazas de los paramilitares unionistas”.
El Sr. Ó Tiarnaigh afirmó que los políticos unionistas “deben condenar enérgicamente e inequívocamente estas acciones y garantizar que todos los ciudadanos se sientan seguros y bienvenidos a participar activamente en las actividades de la comunidad”.
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