Un incendio que dañó gravemente un Orange Hall en el condado de LondonDerry el domingo fue un ataque incendiario, dijo la policía.
El servicio de bomberos y rescate fue llamado al Ballynougher Orange Hall en Aghagaskin Road, cerca de Magherafelt, alrededor de las 17:00 GMT. (hora local). Veintinueve bomberos participaron en la operación de tres horas.
La policía dijo que el incidente estaba siendo tratado como un crimen de odio y que los responsables entraron a la fuerza por la parte trasera de la propiedad. El sargento detective Brian Reid dijo que se usó un acelerante para iniciar el incendio que dejó el edificio "sumamente dañado".
La Orden de Orange dijo que fue un "acto despreciable" y el "último de una larga lista de incidentes de este tipo contra la comunidad Orangista en los últimos años".
"La comunidad Orangista de esta zona no se dejará intimidar por las acciones de quienes están decididos a aumentar las tensiones y provocar la división de la comunidad", añadió un portavoz.
"Sin embargo, apelamos a que no haya represalias, ya que tal respuesta sería incorrecta y totalmente contraproducente".
Otro portavoz de la Orden de Orange dijo que el ataque incendiario es “el último de una larga lista de incidentes de este tipo contra la comunidad Orangista en los últimos años”.
“Este incidente no es solo un ataque contra ladrillos y cemento, sino un ataque premeditado contra la cultura y el patrimonio de Orange en el sur de Londonderry, una tradición arraigada en esta área durante más de doscientos años”, dijo el portavoz.
“Desafortunadamente, con más de 550 ataques a nuestras propiedades desde el Acuerdo de Belfast, está claro que los militantes republicanos no necesitan excusa para atacar Orange Halls. Sus acciones son alentadas y su retórica reforzada por comentaristas intolerantes, caricaturistas, periódicos y académicos que continuamente demonizan a la familia Orangista''.
Pese a lo dicho por ambos (y por otros en el espectro unionista/lealista y en sectores nacionalistas), hay ciertas lagunas en este ataque.
Se produce horas despues de las criticas a la UVF y la UDA por sus amenazas y su decisión de valorar sus altos el fuego, se produce tras las bravuconadas del LCC, se produce en el marco de la furia y desconcierto unionistas, toda la tensión en la comunidad PUL ha visto en este ataque su centro de presión y victimismo y, desde sectores Republicanos ya se apunta a que este ataque a una sede que está en deshuso desde hace tiempo no es sino un ataque de falsa bandera para justificar posibles actitudes violentas en el lealismo.
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