Sam Carson habló con BBC News NI después de que seis vehículos fueran incendiados y destruidos frente a una casa en Lisnevenagh Road, donde viven seis de sus inquilinos.
Los inquilinos, empleados de una gran empresa cercana, se encontraban dentro de la propiedad cuando los coches fueron atacados el domingo por la noche.
La policía está tratando el ataque incendiario como un delito de odio con motivos raciales. Sam Carson es el propietario de la propiedad.
Carson, agricultor y propietario, afirmó haber sido víctima de una "campaña de odio en línea" y cree que el ataque está relacionado con su decisión de alojar a filipinos. Carson afirmó que llevan dos años viviendo en la casa y los describió como "personas pacíficas y trabajadoras".
En declaraciones a BBC News NI, afirmó que nunca había tenido problemas hasta los disturbios de Ballymena en junio. Desde los disturbios, hemos tenido una campaña de odio en TikTok, contra mí y mis inquilinos, pero no le hemos dado importancia.
"A algunos en Ballymena no les gustan los extranjeros, aunque sean buenos trabajadores, no lo entienden".
Añadió: "Las redes sociales tienen un verdadero problema de desinformación, y parece que la policía no puede hacer nada".
Carson dijo que se quejó hace 10 días a la policía por el odio en línea que estaba recibiendo, y que los nombres y la dirección de su granja se publicaron en línea, pero que la policía no pudo hacer nada.
El diputado de la Voz Unionista Tradicional (TUV) por la zona, Jim Allister, afirmó que los ataques eran "incorrectos" y que "estamos tomando medidas con la policía y TikTok". En el programa de Nolan, Allister añadió que "los atacados son inmigrantes legales".
"Vinieron aquí con visas de trabajo. No son ilegales. No son indocumentados. No vinieron hasta que tuvieron un trabajo".
El miembro de la asamblea de Sinn Féin, Philip McGuigan, calificó el ataque de "absolutamente indignante".
"Esto es una continuación de los vergonzosos, malvados y reprensibles ataques racistas que van en contra de la gran mayoría de las personas y comunidades que acogen y apoyan la diversidad", declaró.
Este ataque se suma al fuerte aumento de los delitos de odio racial en el Norte. El jueves pasado, tres viviendas en el norte de Belfast fueron atacadas por motivaciones de odio racista/xenófobo.
Datos recientes muestran que los delitos de odio racial han alcanzado un nivel récord en el Norte. En los últimos 12 meses desde junio, se registraron 1329 delitos con motivación racial. Esta cifra representa un aumento interanual de 434 delitos y es la más alta desde que comenzaron los registros en 2004.
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