Los comentarios de McDonald expresando su confianza en que se celebrarán referendos en ambos lados de la frontera artificial impuesta dentro de seis años se producen en medio de una mayor atención sobre las perspectivas de la reunificación tras el nombramiento de Michelle O'Neill, de Sinn Féin, como primera primera ministra princial del Norte.
Cuando se le pidió que aclarara si eso significaba antes de 2030, respondió: “Sí, y permítanme decir que no está tan lejos, por lo que hay muchísimo trabajo por hacer. Le he dicho constantemente al gobierno de Dublín que realmente necesitan tomar posesión de esta conversación que ahora está en marcha en toda Irlanda. Necesitan darle una estructura y un lugar y, por supuesto, tiene que ser inclusivo.
Queremos escuchar todas las voces, incluidas aquellas para quienes la reunificación no sería su primera opción, aquellos que salen a hacer campaña por la unión. Sin embargo, todos vivimos juntos, eso nunca va a cambiar. Compartimos Irlanda, amamos Irlanda y queremos lo mejor para nuestros hijos y nuestros nietos. Creo que ese es el terreno común más fuerte y poderoso que todos compartimos".
Según los términos del Acuerdo del Viernes Santo, el Secretario británico para ''Irlanda del Norte'' debe convocar un referéndum cuando crea que hay evidencia de que la opinión pública en la región se ha inclinado a favor del cambio constitucional.
Los sucesivos gobiernos británicos se han negado sistemáticamente a especificar públicamente qué criterios se aplicarán al medir el sentimiento público sobre el tema, dejando al arbitrio británico ese extremo clave.
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