
Durante los últimos 11 meses la salud mental y física de Marian se ha deteriorado. A ella se la ha mantenido de forma aislada, un estado que está considerado internacionalmente como una violación de los derechos humanos de los prisioneros tanto por la ONU como por Amnistía Internacional. Marian ha pasado los últimos 11 meses de su internamiento como la única mujer en una prisión de hombres. Esto ha exacerbado aún más su aislamiento y su traslado a la enfermería en Hydebank es el resultado inevitable de un régimen de abandono y aislamiento al que se ha visto obligada a soportar. Marian no ha sido trasladada a la prisión Hydebank sino al ala del hospital allí, ella no va a ser criminalizada y se resistirá a todos los intentos del gobierno británico de tratarla a ella como un criminal.
La IRPWA tiene a petición de la familia de Marian y los representantes legales que dar tiempo a los mecanismos legales en la esperanza de que esta injusticia se revierta. Es evidente para nosotros que no habrá justicia para Marian, o cualquier otro republicano en un tribunal británico en Irlanda. Hoy estamos lanzando una campaña nacional para lograr la liberación de Marian y poner de relieve la manera absurda en la que el gobierno británico ha tratado de justificar su internamiento ilegal contínuo. Hacemos un llamamiento a todos los republicanos y los activistas de derechos humanos a tomar una posición sobre Marian. Marian no es simplemente una figura política a ignorar por motivos partidistas. Marian es una madre, una esposa y una hermana, y debe ser devuelta a su familia. Su caso trae a la mente las palabras de Edmund Burke "El mal triunfa cuando la gente buena no hace nada". Toma una posición con Marian Price y ayuda a revertir este abuso de sus derechos humanos y dignidad.
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