Incidentes en Belfast entre aficionados del Cliftonville y la masiva presencia policial

Se desataron disturbios en Belfast tras la final de la Copa Irlandesa del sábado, mientras un masivo despliegue policial escoltaba a los aficionados del Cliftonville desde Windsor Park.

Los agentes escoltaron a los aficionados del club (que es un referente para la afición Republicana/nacionalista) del norte de Belfast fuera del estadio, en el sur de la ciudad (con sectores lealistas como Village), después de que el Cliftonville perdiera ante el Dungannon Swifts en un partido decisivo por penaltis.

Mientras los aficionados eran conducidos más allá de la rotonda de Broadway, hubo lanzamiento de objetos, incluidas botellas. El fortísimo contingente de agentes antidisturbios obligaron a los aficionados a cruzar el cruce de Broadway, a lo que siguieron jóvenes en el lado de Falls Road de Westlink, que se unieron a los disturbios. 

Se prendió fuego a varios objetos, incluyendo conos de tráfico, mientras que se lanzaron fuegos artificiales y botellas contra la policía.

Antes del partido del sábado, el club había instado a los aficionados a no participar en una gran caminata hacia Windsor Park.
Dijeron que un grupo detrás de la caminata planeada antes del partido "no representa los valores de nuestro club y solo sirve para socavar la reputación de nuestra leal y apasionada afición".  

ACTUALIZACIÓN

Ocho agentes de policía resultaron heridos y tres personas fueron arrestadas durante los disturbios posteriores a la final de la Copa Irlandesa del sábado entre el Cliftonville y el Dungannon Swifts.

 El inspector jefe de la ciudad de Belfast, Mark Conway, declaró: «Si bien la mayoría de los aficionados al fútbol que asistieron a la final de la Copa Irlandesa de ayer se comportaron pacíficamente, una pequeña minoría optó por participar en actividades delictivas, lo que provocó disturbios públicos en las inmediaciones de la rotonda de Broadway aproximadamente a las 17:30 (horario local)».

Se lanzaron objetos contra la policía y al menos ocho agentes resultaron heridos durante el operativo policial, aunque todos permanecieron de servicio. La policía permaneció en la zona para supervisar la situación y evitar una mayor escalada.

Se realizaron tres arrestos en total, incluyendo dos por alteración del orden público y el arresto de un menor por posesión de una bengala.

También se emitieron cinco amonestaciones por posesión de fuegos artificiales, las cuales serán seguidas con informes a la Fiscalía.

El inspector Conway añadió: «La gran mayoría de los aficionados estaban allí para disfrutar del partido; sin embargo, no toleraremos interrupciones, desorden ni comportamiento delictivo de ningún tipo.

Como siempre, seguiremos trabajando con los clubes de fútbol para abordar cualquier actividad delictiva relacionada con los asistentes a los partidos y garantizar la seguridad de los aficionados».