Saoradh.- La ironía de las recientes revelaciones publicadas hoy en el Belfast Telegraph (15 de diciembre) sobre Colum Eastwood saliendo del cuartel de las fuerzas de la corona de Strand Road no pasará desapercibida para los republicanos.
Eastwood afirma que “le pidieron que asistiera a una entrevista” en el cuartel de Strand Road después de caminar junto a las familias de las víctimas del Domingo Sangriento, lo que resultó en la supuesta participación en un desfile no notificado según la legislación británica.
Continuó afirmando que "estaba allí para decirles (a las Fuerzas de la Corona) que no deberían llevar a las víctimas y a sus familias para interrogarlas".
Saoradh toma nota de los comentarios contradictorios de Colum Eastwood.
Hablando de los comentarios de los líderes del SDLP, el representante de Saoradh, Paddy Gallagher, dijo: “Los activistas republicanos y sus familias, muchos de los cuales son víctimas de la continua ocupación británica, son detenidos rutinariamente para ser interrogados por las Fuerzas de la Corona Británica; aunque es más que un interrogatorio. Independientemente de los presuntos delitos, los republicanos y sus familias siempre serán acusados; parece que existe una directiva al respecto”.
Sin embargo, las contradicciones no terminan ahí. Recientemente, Saoradh destacó el reciente acoso de miembros, principalmente adolescentes, de la Banda de Flauta Republicana en Memoria de Tommy Roberts/Stevie Mellon mientras se embarcaban en un ejercicio de formación de equipos que consistía en una caminata de cinco millas en su propia ciudad a lo largo de una vía pública”.
Gallagher continuó: “Aquellos que participaron en la caminata de cinco millas se reunieron en el estacionamiento de Sainsbury a lo largo del muelle en Derry, pero inmediatamente se encontraron con varios miembros del personal de la fuerza de la corona exigiéndoles que desistieran ya que su caminata grupal no había sido solicitada según la ley británica.
No contentas con ser ignoradas, las Fuerzas de la Corona Británica optaron por un plan de ataque abierto con numerosos intentos de detener a los participantes, mientras simultáneamente monitoreaban y registraban sus movimientos mediante drones, jeeps blindados con cámaras, vehículos blindados y personal vestido de civil repartidos por el muelle.
Sin duda, surgirán cargos por ese ejercicio de formación de equipos; sin embargo, a los que enfrentan cargos no se les “pedirá que asistan a una entrevista”, ni se les permitirá irse después de 20 minutos. Esos individuos, y muchos otros republicanos antes que ellos, y sin duda después de ellos, enfrentarán todo el rigor de las Fuerzas de la Corona Británica”.
Gallagher terminó diciendo: “Me pregunto si Colum Eastwood asistiría a un cuartel de la Fuerza de la Corona en nombre de los republicanos que enfrentan cargos similares a los de él y las familias del Domingo Sangriento para decir que el proceso es “una farsa y no debería suceder”; algo me dice que no lo hará”.
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