La casa fue atacada frente a sus dos hijos, de nueve y dos años de edad, la noche del viernes en el norte de Belfast.
Después del ataque, la policía dijo que tres hombres enmascarados habían llamado a la casa y la mujer resultó herida mientras ella se defendió.
La víctima dijo que los hombres la acusaron de ser una traficante de drogas y cuando ella dijo que era inocente, amenazaron con quemar su casa en Rosehead Drive si no se marchaba.
Según la declaración de la mujer, uno de los atacantes dijo que eran de Acción Republicana contra las Drogas (RAAD).
El grupo, que se fusionó con el IRA de 2012 se supone que abandonó sus actividades individuales, y a sabiendas de la caótica sopa de letras que se da en los grupos armados (o simples impostores que usan las siglas a conveniencia) podemos estar detrás de un ataque de distinta autoría.
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