El norte de Irlanda se está convirtiendo en una sociedad más intolerante, según un nuevo estudio realizado por la Comisión de Igualdad,como siempre pongo en cuarentena este tipo de estudios,pero no por ello dejo de reflejarlos,luego que cada uno saque sus conclusiones.
La comisión de estudio sobre 1.071 adultos mostró un mayor número de prejuicios contra las personas, como los gays y los nómadas en comparación con un estudio similar en 2005.
Poco más de la mitad de las personas encuestadas (51 por ciento) dijeron que les preocupa un poco o mucho que tengan un extranjero como un vecino, 10 puntos porcentuales más que en 2005.
Casi una de cada cuatro personas (23 por ciento) dijeron que no les gustaría tener de vecinos a gays, lesbianas o bisexuales, en comparación con el 14 por ciento en 2005.
El mismo número (23 por ciento) dijeron que se sienten lo mismos recelos sobre los trabajadores inmigrantes.
Más de uno de cada seis de los encuestados (16 por ciento) dijeron que no quieren a una persona con mala salud mental como vecino, mientras que el 6 por ciento opinó lo mismo sobre las personas con una discapacidad física. Tener un vecino de otra religión es una dificultad para sólo el 6 por ciento de los encuestados.
Un total de 51 por ciento dijo que si le importa que un pariente cercano fuera a casarse con un extranjero, en comparación con el 38 por ciento en 2005.
En 2005 el 14 por ciento de las personas encuestadas dijeron que trendrían problema de trabajar con un gay, lesbiana o bisexual , aumenta hasta el 23 por ciento en el actual estudio.
Bob Collins jefe de la comisión dijo que lo más reseñable es el 54 por ciento que cree que el prejuicio racial era más prevalente en NI.
Dijo que sin disminuir las preocupaciones provocadas por el estudio, y los ataques contra la población romaní, es importante tener un sentido de perspectiva.
Collins dijo que la encuesta, que se llevó a cabo en septiembre del año pasado, destacó la labor que queda por hacer a fin de cambiar percepciones y actitudes en el norte de Irlanda.
Dijo que los prejuicios religiosos, son similares a los de 2005 ,un 6 por ciento. "Si bien es un consuelo que tan pocas personas expresaron esas actitudes, no podemos asumir que la cuestión de sectarismo ya no es un problema. Sabemos que en verdad es lo contrario ".
Mientras tanto, a raíz de las críticas de cómo la policía trata la intimidación de los rumanos el ayudante jefe Alistair Finlay dijo que se ha aprendido sobre el tema. "No, probablemente, no sabemos lo suficiente acerca de la comunidad rumana. . . y tal vez hemos llegado un poco tarde ", dijo.
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