O'Neill fue arrestado durante una redada en noviembre de 2014 en una casa en Newry, donde se estaba celebrando una reunión del liderazgo del 'Continuity Sinn Fein' y su facción afín del C.IRA (ambos grupos siempre nos han parecido más que oscuros y perjudiciales para el republicanismo, sobre todo para el Republican Sinn Féin, pero ello no quita que reflejemos casos como este). La reunión fue interceptada por el MI5 y once hombres fueron arrestados bajo cargos de "dirigir el terrorismo". Luego fueron sometidos a detención preventiva, sin fecha fija para el juicio.
Después de que O'Neill recibiese una fianza para la libertad condicional muy alta hace dos años, las autoridades británicas se negaron a otorgar ningún subsidio adicional después de su diagnóstico de cáncer intestinal de última etapa. En enero de este año, las autoridades penitenciarias de Maghaberry dijeron que el moribundo "no se entregó a la custodia como se requiere" y se emitió una orden de arresto. Lo habían trasladado de Dublín a Limerick para poder ver sus últimos días entre sus camaradas y amigos.
Sus colegas en el Irish Republican Dependents Fund vinculado al CSF han señalado su tratamiento por parte de los guardias en el norte, donde fue sometido a unos ochenta cacheos degradantes, y fue esposado y atado durante meses de quimioterapia y radioterapia. En uno de sus viajes al hospital, sufrió heridas graves en la cabeza cuando el autobús de transporte de la prisión se detuvo repentinamente.
Mientras estaba en el hospital de Dublín luchando por su vida, el Tribunal Supremo de Belfast rechazó las pruebas médicas y emitió una orden de extradición para que O'Neill fuese devuelto al norte. Aunque fue desafiado con éxito, se le negó el permiso para ser enviado a su casa en Limerick y se emitió una nueva orden de arresto.
Fue enterrado en Limerick la pasada semana con una guardia republicana de honor entre su familia y amigos. Su funeral fue sometido a una fuerte presencia de la rama especial de la Garda.
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