Pese lo dicho por el PSNI, lo cierto es que, nuevamente, el artefacto no llegó a detonar, y el ataque sucede en pleno debate sobre los recortes de financiación en el cuerpo policial.
A pesar de que el dispositivo no explotó, el Superintendente jefe del PSNI Nigel Grimshaw dijo que su estructura era 'preocupante'.
Grimshaw añadió que la bomba, que fue lanzada contra los agentes cerca de una iglesia católica en Ardoyne, era avanzado y sofisticado.
El ataque ocurrió alrededor de las 12:45a.m. (hora local) del martes, cerca de la Iglesia de Holy Cross en Crumlin road y provocó una alerta de seguridad que duró varias horas.
La bomba de dos pies de largo, de fabricación casera, fue arrojada a un vehículo de patrulla policial de rutina, antes de ser encontrado cerca de las puertas de la iglesia.
La alerta de seguridad vio a familias de ocho casas cercanas evacuadas mientras los desactivadores británicos hicieron su trabajo.
Nadie resultó herido en lo que Grimshaw describió como un "acto cruel y temerario".
Horas despues se volvió a acordonar el área ante las sospechas de otro artefacto, extremo que fue descartado tras unas pesquisas en la zona.
De momento no hay reivindicación, de haberla actualizaremos la entrada.
-ACTUALIZACIÓN-
El ataque fallido ha sido reivindicado por el Óglaigh na hÉireann.
No hay comentarios:
Publicar un comentario