Diferentes protestas se llevaron a cabo en el Norte coincidiendo con el funeral de Thatcher.
Hubo una "vigilia de línea blanca" en el oeste de Belfast, organizada por el Sinn Féin, y en el Falls Road hubo concentraciones pequeñas.
Paul Maskey del SF dijo que el Sinn Féin había organizado las white line con banderas negras, para dar la oportunidad de recordar a los huelguistas y los muertos a través de la política de tirar a matar y la colusión.
Gerard Kelly dijo que la protesta era "sólo otra expresión pacífica de cómo la gente se siente aquí".
En el Short Strand grupos de republicanos tuvieron enfrente una contra manifestación lealista.Al parecer ha habido algunos incidentes (que de ser reseñables los apuntaré en otra entrada).
Los republicanos tambien se reunieron en el Free Derry Corner con una protesta con banderas negras.
En el Bogside, miembros del IRSP y del 32 CSM asistieron a las protestas. Hubo una llevada a cabo por el IRSP durante la mañana y luego una caravana de coches que acabó en el Bogside por la tarde con la asistencia de gente de ambos grupos republicanos.
Hombres enmascarados llevaron una pancarta del INLA con referencias al diputado conservador - y amigo íntimo de Thatcher - Airey Neave, que murió en un ataque con bomba lapa del INLA en 1979.
Martin McMonagle del IRSP dijo: "Se trata de recordar a las víctimas del régimen de Thatcher, de su mal gobierno aquí en Irlanda - las víctimas, en particular los huelguistas de hambre, y su política de disparar a matar".
Edel Kelly, sobrina de Patsy O'Hara, prendio fuego a la efigie de Margaret Thatcher, ante unas 400 personas que se reunieron en el Bogside siguiendo la caravana de Shantallow por la tarde.
Los manifestantes, algunos en traje de fantasía, vitorearon cuando la imagen de la baronesa Thatcher fue incendiada.
Muchos de los manifestantes portaban banderas del IRSP y el 32CSM y cantaron, "Maggie Thatcher arde en el infierno", cuando la efigie fue incendiada.
Los organizadores repartieron pequeños cartones de leche, un gesto que marca el plan de Thatcher para abolir la leche escolar gratuita.
A pesar de una fuerte presencia policial en los bordes del Bogside, el PSNI se quedó fuera de la zona durante la manifestación.
Sin embargo, el PSNI detuvo a cuatro personas en la noche del miércoles, con edades comprendidas entre 14 y 22 años, en relación con la incautación de 20 botellas y dos contenedores de gasolina.
Los trabajadores comunitarios dijeron que estarían trabajando para mantener las cosas en calma en la noche, ya que la zona ha visto ataques -algunos sectarios- a lo largo de la semana pasada - en la que se lanzaron cócteles molotov y se atacó a la policía y a la zona unionista/lealista de Fountain.
En londres, la reina Inglesa y el príncipe Felipe asistieron al funeral Ceremonial. El ataúd de la Baronesa Thatcher fue llevado en un carruaje tirado por caballos.
Dignatarios de todo el mundo, incluyendo al primer ministro principal del Norte Peter Robinson, se encontraron entre las figuras políticas en Londres el miércoles.
Miles de personas salieron a las calles de la ciudad para presentar sus respetos a Thatcher, que murió la semana pasada los 87 años.
Más de 30 miembros de los gabinetes de Thatcher entre 1979-90 estuvieron presentes.
Dignatarios de alrededor de 170 países asistieron a la ceremonia, entre ellos dos jefes de Estado y 11 primeros ministros. El ex vicepresidente de EE.UU. Dick Cheney y el ex secretario de Estado Henry Kissinger asistieron a título personal, pero no había miembros de la actual administración de la Casa Blanca.
Entre los miles de invitados que acudieron al funeral, hubo, representación española. El ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo, representó a España oficialmente en el funeral. El jefe de la diplomacia española fue el único miembro del Ejecutivo español que se desplazó a Londres. Además, al funeral también asistió la presidenta del PP de Madrid, Esperanza Aguirre, que profesa pública admiración por la fallecida, que fue invitada en su calidad de Commander de la Orden del Imperio Británico.
Se estima que el funeral costó alrededor de 10 millones de libras - un proyecto de ley que ha enfurecido a algunos - aunque Francis Maude insistió en que la factura final podría ser "mucho, mucho menos".
Pero el funeral de Thatcher, quizá como reflejo de su propio legado político, ha estado polarizado. Los detractores de la ex primera ministra salieron a la calle, además de en Londres, en varios puntos del Reino Unido para mostrar el rechazo a su legado y celebrar con gritos de júbilo la muerte de una política que dividió al país.
Algunos de las personas que se reunieron a protestar, portaba carteles como 'menudo despilfarro'"¡Maggie, Maggie, Maggie, muerta, muerta, muerta!", fue el cántico repetido por una generación de británicos que sufrió en propia carne el thatcherismo y la implantación del neoliberalismo en Gran Bretaña. "Estamos aquí porque nos parece escandaloso gastar este dinero cuando al resto se nos impone la austeridad y para protestar por su legado, con la destrucción de comunidades enteras para favorecer al sector financiero", dijo Jeff Powell, profesor de economía de la Universidad de Londres, que acudió con su esposa y su bebé.
Entre abucheos y eslóganes como 'Menudo despilfarro' y algunos entonando el tema de gospel Oh Happy Day (Qué día tan feliz), el féretro con los restos de la antigua líder 'tory' llegó a su destino. Las protestas y celebraciones abundaron en el norte de Inglaterra, donde más se sintieron en los años 80 los efectos de las políticas de Thatcher, con el cierre de fábricas y minas que sumió a poblaciones enteras en el desempleo.
Hubo una "vigilia de línea blanca" en el oeste de Belfast, organizada por el Sinn Féin, y en el Falls Road hubo concentraciones pequeñas.
Paul Maskey del SF dijo que el Sinn Féin había organizado las white line con banderas negras, para dar la oportunidad de recordar a los huelguistas y los muertos a través de la política de tirar a matar y la colusión.
Gerard Kelly dijo que la protesta era "sólo otra expresión pacífica de cómo la gente se siente aquí".
En el Short Strand grupos de republicanos tuvieron enfrente una contra manifestación lealista.Al parecer ha habido algunos incidentes (que de ser reseñables los apuntaré en otra entrada).
Los republicanos tambien se reunieron en el Free Derry Corner con una protesta con banderas negras.
En el Bogside, miembros del IRSP y del 32 CSM asistieron a las protestas. Hubo una llevada a cabo por el IRSP durante la mañana y luego una caravana de coches que acabó en el Bogside por la tarde con la asistencia de gente de ambos grupos republicanos.
Hombres enmascarados llevaron una pancarta del INLA con referencias al diputado conservador - y amigo íntimo de Thatcher - Airey Neave, que murió en un ataque con bomba lapa del INLA en 1979.
Martin McMonagle del IRSP dijo: "Se trata de recordar a las víctimas del régimen de Thatcher, de su mal gobierno aquí en Irlanda - las víctimas, en particular los huelguistas de hambre, y su política de disparar a matar".
Edel Kelly, sobrina de Patsy O'Hara, prendio fuego a la efigie de Margaret Thatcher, ante unas 400 personas que se reunieron en el Bogside siguiendo la caravana de Shantallow por la tarde.
Los manifestantes, algunos en traje de fantasía, vitorearon cuando la imagen de la baronesa Thatcher fue incendiada.
Muchos de los manifestantes portaban banderas del IRSP y el 32CSM y cantaron, "Maggie Thatcher arde en el infierno", cuando la efigie fue incendiada.
A pesar de una fuerte presencia policial en los bordes del Bogside, el PSNI se quedó fuera de la zona durante la manifestación.
Sin embargo, el PSNI detuvo a cuatro personas en la noche del miércoles, con edades comprendidas entre 14 y 22 años, en relación con la incautación de 20 botellas y dos contenedores de gasolina.
Los trabajadores comunitarios dijeron que estarían trabajando para mantener las cosas en calma en la noche, ya que la zona ha visto ataques -algunos sectarios- a lo largo de la semana pasada - en la que se lanzaron cócteles molotov y se atacó a la policía y a la zona unionista/lealista de Fountain.
En londres, la reina Inglesa y el príncipe Felipe asistieron al funeral Ceremonial. El ataúd de la Baronesa Thatcher fue llevado en un carruaje tirado por caballos.
Dignatarios de todo el mundo, incluyendo al primer ministro principal del Norte Peter Robinson, se encontraron entre las figuras políticas en Londres el miércoles.
Miles de personas salieron a las calles de la ciudad para presentar sus respetos a Thatcher, que murió la semana pasada los 87 años.
Más de 30 miembros de los gabinetes de Thatcher entre 1979-90 estuvieron presentes.
Dignatarios de alrededor de 170 países asistieron a la ceremonia, entre ellos dos jefes de Estado y 11 primeros ministros. El ex vicepresidente de EE.UU. Dick Cheney y el ex secretario de Estado Henry Kissinger asistieron a título personal, pero no había miembros de la actual administración de la Casa Blanca.
Entre los miles de invitados que acudieron al funeral, hubo, representación española. El ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo, representó a España oficialmente en el funeral. El jefe de la diplomacia española fue el único miembro del Ejecutivo español que se desplazó a Londres. Además, al funeral también asistió la presidenta del PP de Madrid, Esperanza Aguirre, que profesa pública admiración por la fallecida, que fue invitada en su calidad de Commander de la Orden del Imperio Británico.
Se estima que el funeral costó alrededor de 10 millones de libras - un proyecto de ley que ha enfurecido a algunos - aunque Francis Maude insistió en que la factura final podría ser "mucho, mucho menos".
Pero el funeral de Thatcher, quizá como reflejo de su propio legado político, ha estado polarizado. Los detractores de la ex primera ministra salieron a la calle, además de en Londres, en varios puntos del Reino Unido para mostrar el rechazo a su legado y celebrar con gritos de júbilo la muerte de una política que dividió al país.
Algunos de las personas que se reunieron a protestar, portaba carteles como 'menudo despilfarro'"¡Maggie, Maggie, Maggie, muerta, muerta, muerta!", fue el cántico repetido por una generación de británicos que sufrió en propia carne el thatcherismo y la implantación del neoliberalismo en Gran Bretaña. "Estamos aquí porque nos parece escandaloso gastar este dinero cuando al resto se nos impone la austeridad y para protestar por su legado, con la destrucción de comunidades enteras para favorecer al sector financiero", dijo Jeff Powell, profesor de economía de la Universidad de Londres, que acudió con su esposa y su bebé.
Entre abucheos y eslóganes como 'Menudo despilfarro' y algunos entonando el tema de gospel Oh Happy Day (Qué día tan feliz), el féretro con los restos de la antigua líder 'tory' llegó a su destino. Las protestas y celebraciones abundaron en el norte de Inglaterra, donde más se sintieron en los años 80 los efectos de las políticas de Thatcher, con el cierre de fábricas y minas que sumió a poblaciones enteras en el desempleo.
¿continua el INLA en activo?
ResponderEliminarNo, en un comunicado leído el domingo 11 de octubre del 2009 durante un acto conmemorativo celebrado en un cementerio de la localidad de Bray, cercana a Dublín, el INLA aseguró que la lucha armada "ha terminado".
ResponderEliminarEbntonces reconocieron que el objetivo histórico de unificar la isla bajo una república socialista sería alcanzado por "medios exclusivamente pacíficos".
El 9-febrero-2010 el grupo en otro comunicado anunció su desarme.
Un saludo.