Una amalgama de lealistas, neonazis, pro sionistas, extremistas de derechas llegados desde Dublin y, algunos ciudadanos descontentos con la situación de la inmigración en el 'Reino Unido' (espoleados todos ellos desde que un adolescente de 17 años, identificado como Axel Rudakubana, matara a tres niñas y acuchillara a otros ocho menores y dos adultos durante una sesión de música en un centro recreativo de verano en Southport) han dado rienda suelta a una cacería contra todo aquello que 'huela' a extranjero, provocando el incendio de una cafetería y una tienda en Belfast anoche; También se incendiaron coches y contenedores en la zona del lealista Sandy Row, en un día en el que se intensificaron los desórdenes esporádicos.
Desde la noticia del apuñalamiento, activistas de extrema derecha reaccionaron con violencia en localidades de Reino Unido tras extenderse por las redes sociales rumores falsos de que el autor del ataque en Southport era un inmigrante musulmán que había cruzado ilegalmente en patera el Canal de la Mancha el año pasado, igualmente en el sur de la frontera artificialmente impuesta en Irlanda se están sucediendo concentraciones violentas contra la inmigración desde hace algún tiempo. A esto se suma ahora Belfast y Bangor (esta última sin violencia de momento).
De hecho, pese a que algunos quieren decir que las protestas de anoche en Belfast unieron a 'católicos y protestantes', lo cierto es que lo que había era lealistas y unos pocos extremistas de derechas venidos desde Dublín, que enarbolaban la tricolor irlandesa y la de las cuatro provincias. De otro lado el Belfast C.N.R. era ajeno a las protestas y en gran medida estaba celebrando el Féile en el Falls Road congregando a decenas de miles en un ambiente totalmente festivo.Caso singular era el de un irlandés de Drogheda que llevaba una tricolor en la que ponía que 'la invación masiva de un país es un acto de guerra' todo ello en Belfast justo delante de una gran Union Flag que portaban unos lealistas, para hacerselo mirar, sin duda.
Previo a los disturbios nocturnos del sábado, estallaron pequeños incidentes después de que grupos antagonistas se enfrentaran en el centro de la ciudad.
En un momento dado, la policía formó un gran cordón alrededor del Centro Islámico en University Street mientras una marcha contra la inmigración se dirigía hacia la zona.
Los incidentes se sucedieron y la policía detuvo a dos personas mientras que se atacaban comercios, y se lanzaron objetos contra agentes del PSNI.
Cientos de personas se reunieron en la manifestación Unity Over Division, en apoyo a las comunidades musulmanas. Algunos de los presentes llevaban carteles que decían "no al racismo" y "los refugiados son bienvenidos".
Poco después, los manifestantes antiislámicos llegaban cerca del Ayuntamiento. Algunos corearon "Islam fuera", mientras que otros llevaban un cartel con la leyenda "Coolock Says No", en referencia a un lugar en Dublín que se estaba renovando para acoger a los solicitantes de asilo.
Aunque la manifestación contra la islamofobia terminó poco antes de la 1 de la tarde (horario local), los manifestantes antiinmigración se trasladaron al sur de Belfast, llegando a Ormeau Road, donde unos 100 residentes locales CNR les hicieron retroceder.
Varios comercios de la avenida Botanic fueron atacados.
Se rompieron ventanas y muebles en el café de shisha Sahara. Los extremistas también destrozaron las ventanas del Holiday Inn y Dukes de University Street. Después, ya entrada la noche, se incendiaron coches y contenedores en la zona del lealista Sandy Row.
El propietario de un supermercado atacado, Bashir, dijo que los negocios musulmanes estaban siendo atacados deliberadamente. Los bomberos también acudieron al Bash Cafe, que estaba en llamas.
El PSNI dijo que cuatro personas fueron arrestadas después de 13 informes de daños criminales y cinco de incendio provocado.
Tres agentes de policía resultaron heridos durante los disturbios: dos permanecieron de servicio mientras que el tercero fue relevado de sus funciones después de sufrir una conmoción cerebral.
Un día triste para Belfast, que no puedo hacer olvidar que este tema se tendrá que abordar a fondo en una Europa cada vez más convulsa, o se aborda y se debate seriamente o hechos como estos solo serán la mecha de algo mucho más grave que será arovechado cada vez más por lo más extremo de la derecha xenófoba y racista.
He leido que uno de los localed atacados era de un hombre al que ya habian atacado su anterior negocio en una zona lealista hace años. Luego se quejarán de que tienen sus barrios degradados con decenas de locales vacios y sin actividad.
ResponderEliminarEs lo más paradógico, en su odio atacan precisamente a los extranjeros que están generando en el pais, que tienen negocios, que pagan impuestos, que crean riqueza. Precisamente los inmigrantes que se han integrado más son los que más sufren esto.
ResponderEliminar